La filosofía Slow ha ido ganando más adeptos a lo largo del tiempo, aportando valor a todo cuanto se hace, trabajando con calma y garantizando que los resultados de todo cuanto llevamos a cabo son espectaculares. La slow food, por ejemplo, fue una de las principales tendencias en ganar terreno en la sociedad, puesto que la comida preparada con cariño, con esmero y con dedicación, evocan tiempos felices y paladares inigualables.
Este pensamiento llega también a la decoración y al diseño, sobre todo tras vivir la llegada de la Covid-19 a nuestra sociedad, y es que las casas se han convertido en auténticos hogares y centros neurálgicos de nuestras vidas que han conseguido alcanzar la importancia necesaria para que todo cuanto se haga en ellas sea cómodo, práctico y acogedor.
El Slow Design es la solución a la nueva normalidad y como nueva tendencia en diseño, desde Emuca vamos a explicarte todo cuanto necesitas saber al respecto para que puedas resolver las necesidades de todos tus clientes. ¡Adelante!
¿En qué consiste la nueva tendencia en decoración Slow design?
El Slow Design es un concepto y una filosofía relativamente nueva en la que se destacan las ventajas de llevar a cabo cualquier diseño con paciencia, tiempo y sobre todo con una visión de futuro más factible.
Pero no solo se relaciona con el tiempo que se invierte, sino con la metodología que se utiliza, la búsqueda de las referencias y el pensamiento a largo plazo.
No se trata de diseñar y punto, sino de disfrutar de todo el proceso mientras se hace y por parte del profesional y del propio cliente.
Características de Slow Design
El Slow Design es mucho más que tiempo. Y entre las principales características de esta nueva tendencia en decoración cabe destacar las siguientes:
- Eficiencia: se minimiza la energía dedicada, los recursos físicos utilizados, las pérdidas de tiempo y la mano de obra utilizada.
- Sostenible: la sostenibilidad es prioritaria en nuestra sociedad actual y el Slow Design reduce el daño y el impacto que la creación crea en el entorno todo lo posible.
- Duradero: el fin es conseguir resultados a largo plazo, por lo que se intentan reducir al máximo reemplazos o reparaciones.
- Ecológico: todos los productos utilizados deben ser reciclados, orgánicos o ecológicos y que, por tanto, no utilicen tóxicos que puedan contaminar.
Qué tener en cuenta antes de crear un concepto Slow Design en tus proyectos
Antes de iniciar un proyecto Slow Design, debes tener en cuenta una serie de conceptos que te ayudarán a conseguirlo. En primer lugar tienes que empatizar con el cliente, escuchar qué es lo que quiere y ayudarle a transformar sus ideas en un proyecto Slow Design. Por tanto, plantea espacios amplios y en armonía que se comuniquen entre sí y que inviten a la relajación y a la comodidad.
En cuanto a los herrajes de decoración, asegúrate que sean ecológicos, duraderos y eficientes. Y que todo el proceso que ha llevado a su fabricación y distribución sea completamente sostenible y en condiciones humanas adecuadas.
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Otro aspecto imprescindible para crear ese ambiente único de Slow Design es agregar más conceptos que invoquen a la naturaleza, con materiales y colores orgánicos que faciliten la armonía. Otro imprescindible es que las diferentes zonas comunes que diseñes inviten a conversar, a la tranquilidad y al bienestar.
¡Ya lo sabes! Únete a las nuevas tendencias en decoración, únete al Slow Design, y disfruta de cada uno de los pasos que des hacia el desarrollo de tu proyecto.
Tanto la experiencia de tus clientes como la tuya propia como profesional serán inolvidables, dando como resultado un proyecto único, inigualable, inimitable y, por supuesto, acorde con las necesidades de nuestro mundo y de nuestra sociedad. En Emuca te ofrecemos todos los herrajes Slow Design que necesitas.
El futuro ya está aquí ¡forma parte de él!
