Lograr una cocina soñada que desborde comodidad y eficiencia, además de seleccionar correctamente los muebles, electrodomésticos y equipos para preparar los alimentos. También depende de los pequeños detalles, en especial aquellos situados a tus pies; elegir el zócalo de cocina adecuado ciertamente marca la diferencia.
Estas piezas representan unos de los elementos indispensables de uno de los espacios más significativos de tu hogar. Cubren imperfecciones y juntas perimetrales, esconden patas, añaden valor estético y protegen la tabiquería y los muebles de las inclemencias relativas al uso de ese espacio.
Ahora bien, ¿Todos son iguales? ¿Cómo puedo elegir los mejores? En Emuca complacemos tu curiosidad; sigue leyendo y en poco tiempo sabrás cuáles son los que te convienen más, de forma sencilla.
¿Qué factores tener en cuenta al elegir el zócalo de cocina?
Como has leído anteriormente, los zócalos ofrecen características estéticas y funcionales considerables. Si bien adquirir estas piezas de fabricantes reconocidos por lo general avala una elección segura, lo mejor es examinar las especificaciones del producto y confirmar que sea de calidad y posea los elementos que buscas.
Entre los factores clave al elegir el zócalo de cocina se encuentran los materiales utilizados para su fabricación, métodos de instalación, durabilidad y otros factores de seguridad añadidos:
Materiales de fabricación:
El tipo de material del zócalo de cocina influye en gran medida cuan resistente es a la humedad, a los detergentes y a los impactos, cuáles métodos de montaje o tratamientos posteriores admite, así como también en sus cualidades estéticas.
Si bien en la actualidad se emplea una gran variedad de materia prima para fabricar estas piezas, algunas son más populares que otras. A continuación, verás las más comunes.
- Madera natural: los clásicos rodapiés de madera maciza de estilo rústico apreciado por muchos. Su aplicación ha ido en detrimento a causa de otras alternativas más ventajosas.
- Tableros de madera: entre los derivados de madera como aglomerados, contrachapado y MDF, este último es el más usado. De menor coste y más fáciles de instalar que los de madera natural.
- Aluminio: este material metálico es en la actualidad una opción ampliamente utilizada debido a su dureza y a su distintiva superficie, atractiva y deseada para cocinas modernas.
- Polímeros: los plásticos como el PVC se han convertido en una solución ideal, puesto que permiten zócalos económicos, de acabado limpio, muy manejables, duraderos y resistentes a la humedad, insectos y a los hongos.
- Cerámicos: accesibles y masificados, una elección frecuente gracias a su acabado particular y su equilibrio con los pisos de baldosas.
- Combinados: en el mercado existen modelos que combinan dos o más materiales para ofrecer un producto superior, con lo mejor de cada uno.
A modo de sugerencia, y para una elección rápida, el PVC suele ser una opción segura que se adapta fácilmente a la mayoría de las cocinas.
Colocación y montaje:
En cuanto a los métodos de instalación más extendidos hallarás tres fundamentales; disponibles según las características propias del zócalo, como su tamaño, peso y materiales.
- Pegado: un sistema sencillo de sujeción para rodapiés permanentes o semi; comprende la utilización de espuma de poliuretano, silicona, pegamentos plásticos de contacto, cintas adhesivas, morteros y mezclas especiales, entre otros.
- Accesorios: los clips, ganchos, muescas integradas en el zócalo y soportes forman parte de este método de fijado; ideales para cuando se busca una opción que facilite el reemplazo o el desmontaje.
- Clavos y tornillos: una tradicional forma de anclar un rodapié de cocina a la pared, que actualmente está restringido a unas pocas situaciones.
La elección en este caso obedece a si es relevante, o no, una instalación inamovible. Por lo general, y en sintonía con las cocinas modulares modernas, utilizar métodos desmontables ofrece mayor comodidad.
Tratamientos complementarios:
Otro factor importante, y que puede pasarse por alto, al adquirir un rodapié son las características especiales. Estos son por lo general procedimientos de fábrica, tales como tratamientos ignífugos, la aplicación de capas superficiales para contrarrestar la humedad o similares.
Como es de suponer, agrega cualidades valiosas en función de su costo final. Define si vale la pena la inversión, aunque probablemente sea de ese modo. Antes de hacer la compra es una excelente idea primero asegurar si tu rodapié dispone de alguna de ellas.
Elegir el zócalo de cocina: tendencias y consejos
Los estilos de rodapiés son muchísimos y las combinaciones posibles son prácticamente infinitas. No obstante, en el ámbito del diseño de interiores prevalecen los diseños minimalistas, de temática moderna y neutralidad entre todos los componentes decorativos.
Por ejemplo las siempre en boga tonalidades claras; el blanco y sus variantes son opciones perfectas para un zócalo de cocina; mezclándose bien con los matices de las paredes y todo tipo de muebles, otorgando formalidad y comodidad.
Y por último, no desistas en aprovechar la composición suelo-zócalo. Complementa el estilo del pavimento de tu cocina con un zócalo de rasgos similares, el resultado es sencillamente espectacular. Al elegir el zócalo de cocina, ten esto en cuenta y acertarás.
